Leche infantil: ¿Cuál es la mejor del mercado?

Una de las primeras decisiones a las que se enfrentan los padres es si quieren optar por la lactancia materna o una leche infantil. En muchos aspectos son similares, pues ambas proporcionan nutrientes, hidratación y energía.

Una nutrición adecuada es clave para que los bebés se desarrollen a nivel físico y mental. Por eso, es esencial escoger bien cómo alimentar a los más pequeños, y la leche de fórmula es una gran solución cuando la materna no es suficiente.

La OMS, por su parte, indica que la lactancia materna debe ser la opción escogida durante el primer semestre de vida. Y la puedes complementar con otros alimentos hasta los dos años.

Qué es y para qué sirve la leche infantil

La leche infantil o leche de sustitución es una solución cuando el bebé no puede alimentarse con la lactancia materna. Este preparado artificial ofrece las propiedades nutritivas que obtendría de la madre.

No obstante, la AEP (Asociación Española de Pediatría) recomienda la leche materna en lugar de fórmula siempre que no exista una circunstancia que lo impida.

¿Cuándo es la leche artificial la mejor opción?

• En casos en los que el bebé nazca de forma prematura.
  
• Cuando los recién nacidos tengan reflejo de succión débil.
  
• Si para la madre la lactancia es muy dolorosa o toma medicamentos incompatibles con la lactancia para tratar ciertos problemas de salud.
  
• Ante la reincorporación al trabajo.
  
• En mujeres en las que la leche no sube o que tienen un herpes en la zona de la mama.
  

¿En qué se diferencia de la leche materna?

No es sencillo decidir cómo vas a alimentar a tu bebé. Algunas personas tienen muy claro que van a apostar por la lactancia materna y, luego, se ven obligadas a utilizar la leche infantil. Por ello, aunque puedes barajar tus deseos antes de que llegue el momento, hasta que no nazca el bebé no tomarás la decisión definitiva.

El estilo de vida y la propia naturaleza de la mujer son dos factores que ayudarán a tomar la mejor decisión en cada caso. No obstante, debes conocer las diferencias entre la leche materna y la de fórmula.

En primer lugar, la materna se digiere con mayor facilidad, motivo por el cual los bebés amamantados sufren menos episodios de estreñimiento o diarrea. Por otro lado, la madre le proporcionará al bebé a través de la lactancia las vitaminas y minerales que necesita. Sin embargo, hay una excepción clara: la vitamina D. Los pediatras recomiendan administrar un suplemento de esta vitamina durante los primeros meses de vida hasta que consuman leche enriquecida con ella en cantidad suficiente. Esto suele ser a partir del primer año de vida.

La leche infantil, por su parte, está formulada con todos los nutrientes necesarios para el desarrollo del bebé, incluida la vitamina D.

Beneficios y contraindicaciones de la leche infantil

Los beneficios de la lactancia materna son ampliamente conocidos, pero suele haber controversia con la leche artificial. Veamos cuáles son sus ventajas e inconvenientes.

Ventajas de la leche infantil

• Flexibilidad y comodidad. Amamantar es molesto en general, pero hay algunas mujeres que sienten un gran dolor. La leche de fórmula es una excelente opción para evitar esas molestias físicas.
  
• Lactancia participativa. Otra de las ventajas es que, como las tomas se dan con un biberón, el padre también puede participar del proceso y la madre puede tener mayor libertad.
  
• Frecuencia de las tomas. Los bebés que se alimentan con una leche de sustitución no necesitan comer tan a menudo como los que lo hacen con la lactancia materna.
  
• La madre no tiene por qué adaptar la forma en la que se alimenta durante este período. El bebé recibe los nutrientes con la leche infantil y el biberón, por tanto, su alimentación solo debe dedicarse a ella misma.
  

Inconvenientes de este tipo de alimentación

• Menos aporte de nutrientes y anticuerpos. La leche infantil carece de algunos nutrientes que no se le pueden incorporar. Por ejemplo, el calostro. La leche materna es una sustancia viva que elabora la madre para un bebé concreto y este proceso no se puede reproducir de forma industrial. Asimismo, esta solución para la alimentación del bebé no incluye anticuerpos, por lo que el estará más expuesto a enfermedades e infecciones.
  
• Coste. La leche de fórmula tiene un coste económico que la leche materna no tiene.
  
• Más estreñimiento y gases. Las deposiciones son más duras en los bebes alimentados con leche artificial.
  

¿Hay varios tipos de leche infantil?

En función de la edad del bebé y sus necesidades, podemos clasificar la leche artificial de la siguiente manera:

• Inicio. Es la que se utiliza para los bebés desde el primer día hasta los 6 meses. Durante este tiempo será el único alimento. En su fabricación se han tenido en cuenta los nutrientes que aporta la leche materna para hacerla lo más parecida posible.
• Continuación. Es la que se administra después del primer semestre de vida y ya se combina con otros alimentos. Se puede tomar hasta los 3 años, según la Sociedad Europea de Gastroenterología, Hepatología y Nutrición. La razón es que su contenido nutricional es mejor que el de la leche de vaca.
• Fórmula adaptada. Esta formulación contiene una serie de ingredientes que hacen que se parezca a la leche materna a nivel fisiológico. Hablamos de sustancias como ácidos grasos poliinsaturados, oligosacáridos y nucleótidos.
• Fórmula especial. Es una leche infantil que se prescribe a bebés que tienen determinados trastornos o patologías como dermatitis, vómitos y diarrea. Del mismo modo, también hay leches con una fórmula especial para los bebés prematuros. Para estos casos, las leches artificiales tienen una composición de calorías mayor.
  

Por otro lado, la leche de sustitución podemos comprarla lista para servir, que es un poco más cara, pero no necesita mucha preparación de antemano, o podemos comprarla en polvo, que requiere una mayor preparación que la anterior, es más económica y se puede elaborar con agua no embotellada.

La leche infantil, ¿tiene aceite de palma?

Ya te hemos indicado que el objetivo de la leche infantil es que se parezca lo máximo posible a la leche materna. De este modo, el bebé podrá asimilarla mejor. Sin embargo, los bebés lactantes necesitan mucha grasa, lo que hace que la leche sea grasa en aproximadamente un 50 %. Restringir este aporte en la primera etapa de la vida puede tener efectos negativos tanto en el desarrollo como en el crecimiento de los bebés.

Un 25 % de ese 50 % de grasa está constituido por ácido palmítico, que es el principal ácido graso del aceite de palma. Sin embargo, no es cualquier ácido palmítico, sino palmitato, que va a favorecer la absorción de otros ácidos grasos y calcio. Por tanto, es beneficioso para el intestino a nivel de la microbiota intestinal y de su mucosa.

Entonces, ¿es bueno que tenga palmitato la leche infantil? Por supuesto. La leche materna contiene un 25 % de ácido palmítico, por tanto, las leches artificiales intentan respetar este porcentaje.

Así, si el aceite de palma está en forma de palmitato, no tendrás que preocuparte por la salud del bebé, ya que de este modo es saludable para él.

La mejor leche infantil del mercado según la OCU

La Organización Independiente de Consumidores (OCU) evalúa diferentes productos en condiciones de laboratorio bajo unos determinados criterios. Por ello, los resultados de sus pruebas suelen ser fiables. Pero antes de hablar sobre cuál es la mejor leche infantil del mercado según la OCU, vamos a ver qué criterio debemos seguir para escogerla.

• Formato de la leche. Lista para servir, en polvo o concentrada. Todo dependerá de tus necesidades y economía.
  
• Contenido en vitaminas y minerales. Las leches infantiles están enriquecidas con minerales, vitaminas, hierro, calcio, vitaminas C y D…, pero también debes prestar atención al resto de su composición para escoger la más completa. Además, si el bebé tiene alguna deficiencia en concreto, es muy importante escoger la mejor para su caso.
  
• Aporte de proteínas. De una marca a otra la diferencia puede ser notable. Te recomendamos que te fijes en la cantidad de proteínas que se aportan cada 100 mililitros. Debe rondar entre 0,9 y 1 gramos durante el primer año de vida.
  
• Grasas. La leche materna tiene 3,8 gramos de grasas por cada 100 mililitros, algo a tener en cuenta antes de comprar la leche infantil.
  
• Tipo de hidratos de carbono. A no ser que el bebé sea intolerante a la lactosa, este debería ser el carbohidrato que debes buscar en la formulación de la leche. Si no es posible, decántate por leches formuladas con hidratos de carbono naturales.
  

Blemil Plus Confort Blemil Plus Confort es una fórmula que satisface las necesidades nutricionales de los bebés. Es muy digestible, alivia los síntomas de los cólicos y se elabora con proteínas de suero parcialmente hidrolizadas. Reduce el estreñimiento y las regurgitaciones.

Además, está enriquecida con taurina y carnitina para aportar mayor energía a partir de las grasas. Contiene beta palmitato, vitaminas y minerales, prebióticos y carbohidratos.

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